Aquí entran los vehículos corrientes, pero modificados para trabajos específicos, que tiene la NASA. Hace poco, la agencia presentó los nuevos coches eléctricos que llevarán a los astronautas a las naves espaciales. Así sustituyeron la vieja Astrovans que lo hacía antes.
Volviendo al vehículo que atañe a la noticia. La antigua furgoneta es una Ford Econoline E-250 de tonalidad gris que ha salido a la venta por nada menos que 26.795 dólares. El precio, y como señalan los compañeros de Ars Technica, es mucho mayor que en las guías de precios de este modelo, pero tiene una explicación.
Que precio inicial de venta sea tan alto tiene que ver con el equipo que lleva a bordo. Hace años la NASA utilizaba este tipo de vehículos para tareas de vigilancia en perímetros. Por eso mismo la Ford E-250 incorpora cámaras retráctiles, radios, grabadoras de audio y video y monitores que ocupan una parte importante.
Si todo esto os recuerda al equipamiento que tenían las furgonetas policiales de las películas en la década de 1980 y 1990 estáis en lo cierto, pues contiene todo lo necesario para llevar a cabo una misión de vigilancia por tiempo indefinido. En este caso no está camuflada con si fuera una furgoneta de reparto de pizza, sino que es muy discreta.