La Misión Peregrine Uno (PM1) de Astrobotic se enfrentó a una pérdida “crítica” de propulsor.
La mañana de este martes 9 de enero, México y la UNAM recibieron “malas noticias”, y es que la misión “Colmena”, que iba a bordo de la Misión Peregrine Uno (PM1) de Astrobotic se enfrentó a un fallo en el sistema de propulsión.
Lo que hasta el momento se ha informado, es que la misión se ha tenido que limitar al momento de capturar datos del trayecto, ya que a las pocas horas del despegue el cohete empezó a perder energía por el problema que tuvo en los paneles.
Cabe destacar que La Misión Peregrine Uno (PM1) de Astrobotic se lanzó esta madrugada con éxito sobre el nuevo y poderoso cohete Vulcan Centaur de United Launch Alliance (ULA) desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida, pero a las pocas horas empezó a perder energía por el problema de los paneles.
El módulo lunar Peregrine lleva instrumentos científicos de siete países, entre ellos los de la primera misión lunar mexicana conocida como «Proyecto Colmena», de la UNAM, con diminutos robots para estudiar la superficie lunar.
Aunque en un inicio, tras la activación exitosa de los sistemas de propulsión, el módulo Peregrine entró en un estado operativo “seguro”, “desafortunadamente se produjo una anomalía” que impidió a Astrobotic lograr una orientación estable hacia el Sol “, explicó la empresa.
Después, la compañía anunció que había logrado reorientar los paneles solares del Peregrine hacia el Sol para su abastecimiento y que además ha recobrado la comunicación que había perdido con la nave hace pocas horas.
Sin embargo, identificó que el fallo estaba relacionado con un problema dentro del sistema de propulsión, lo cual representa una amenaza para la capacidad de la nave espacial de realizar un alunizaje
En ese sentido la empresa estadounidense ULA comentó que pese a los “problemas con el módulo de alunizaje “, la misión inaugural del cohete Vulcan es “un paso más para volver a llevar humanos a la Luna”.