El actor Brad Pitt intensificó su disputa legal con Angelina Jolie al presentar una demanda por 35 millones de dólares, acusándola de haber vendido su parte del viñedo Château Miraval en la Provenza, Francia, sin darle su aprobación.
Según documentos judiciales obtenidos por la revista People, Pitt alega que Jolie procedió con la venta de su participación del 50 % a la empresa Tenute del Mondo sin que él fuera informado ni prestara su consentimiento, a pesar de que, según su versión, ambos habían acordado no desprenderse de la propiedad sin la aprobación mutua.
En noviembre de 2023, intercambios de correos entre los abogados de ambas partes dieron cuenta de que Jolie señaló que la responsabilidad de reunir y presentar pruebas recaía en Pitt, en un intento de frenar la demanda.
La demanda se suma al litigio iniciado en 2022, cuando Pitt ya había acusado a Jolie de vender sin su consentimiento la mitad de la participación del viñedo. Jolie, por su parte, negó la existencia de un acuerdo que impidiera la venta y presentó una contrademanda, calificando la acción de Pitt como una “guerra vengativa”.
La próxima audiencia pública está prevista para el 17 de diciembre.
Pitt y Jolie se conocieron durante el rodaje de Mr. & Mrs. Smith en 2005, se casaron en 2014, se separaron oficialmente en 2019 y cerraron su divorcio hasta finales de 2024. Comparten la custodia de sus seis hijos.
¿Por qué importa este caso?
El viñedo Château Miraval no es una propiedad común: su valor simbólico y económico es alto para ambas partes, por lo que la disputa representa más que un desacuerdo personal. Esta demanda puede redefinir acuerdos previos de propiedad compartida y custodio de activos entre celebridades.
Adicionalmente, el enfrentamiento legal público puede tener implicaciones reputacionales para ambas figuras, así como para las entidades involucradas en la compra-venta del inmueble.
Conclusión
La demanda de Brad Pitt contra Angelina Jolie por 35 millones de dólares marca un nuevo capítulo en un litigio prolongado que aborda la venta del icónico viñedo Château Miraval sin consentimiento mutuo. La resolución de este conflicto podría sentar precedentes en casos de bienes compartidos entre ex-parejas de alto perfil.